Zegama Aizkorri

Otro año más hemos incluido esta salida en nuestro calendario, pero se nos está resistiendo.

Este año la previsión dice que tendremos lluvia fina por la mañana y que el día abrirá a mediodía. A la hora de partir el pronostico es correcto y con algo de niebla partimos a Zegama. Nos reunimos con Izaskun y vamos hasta el apeadero de Zegama para comenzar la marcha.

La niebla sigue dejando escapar algo de agua pero con la esperanza de que levante el día partimos. El camino será por una pista ancha hasta la ermita de Santi Spiritu. Este es el primer objetivo que nos hemos marcado. Desde allí decidiremos que hacer.

El camino transcurre prácticamente en su mayoría entre pinos y hayas. Por momentos nos encontramos con rincones de gran encanto, los cuales son acentuados por ese aire misterioso que provoca la niebla.

Ya en la ermita de Santi Spirit toca decidir que hacer. El día no ha mejorado nada, por lo que será mejor dejar Aizkorri y su cresterío para otro día. Como estamos muy cerca del túnel de San Adrian decidimos continuar hasta él. Junto a su ermita comemos un poco de fruta y vuelta por el mismo camino de la ida.

Son las dos y ya estamos en el coche, pero aun así hemos hecho unos veinte kilómetros. Volvemos hasta Zegama y buscamos sitio para comer un menú.

Hoy no hemos conseguido nuestro objetivo montañero. Lo realmente importante en este grupo es el rato que pasamos juntos, así que el objetivo está cumplido. El camino al Aizkorri desde Zegama seguirá ahí y tendremos ocasión de volver.

Desde Bidelagun damos la bienvenida a Izaskun, que por cosas del destino tiene el mismo nombre que la cuñada de Nora.

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Txindoki infantil

Partimos de Bilbao a las 8 de la mañana para llegar a Larraitz sobre las 9:30.  El objetivo es el Cervino, pero el vasco. El Txindoki es conocido también de esta manera por su parecido con ese otro clásico de los Alpes. Es una preciosa montaña que no debe faltar en el listado de ningún aficionado.

Suponemos que iremos como en procesión y es que el parking está bastante lleno de coches. Comenzamos a caminar y pasamos la valla al final del parking. Durante casi el primer kilómetro el trayecto transcurre por una cómoda pista. Luego un desvío a la izquierda, nos hará atajar la pista y ya subiremos por un sendero un poco mas incómodo a tramos debido a las piedras que asoman. 

El recorrido no tiene pérdida ya que está balizado como PR, con lo que con seguir las marcas blancas y amarillas llegaremos a la cima.

El camino continúa ascendiendo sin demasiada pendiente. Durante un pequeño tramo el pinar de uno de los lados del camino nos da un poco de sombra. Justo al acabar el pinar ya divisamos a nuestra derecha el Ausa Gaztelu. Una bonita cima que ya visitamos el año pasado los mayores.

El día había amanecido con bruma pero a estas horas el sol ya está apretando sobre nuestras cabezas. La fuente del río Oria nos sirve para refrescarnos un poco. Unos metros después de la fuente volveremos a pasar otra valla para hacer un par de zetas por una pendiente que va creciendo poco a poco.

Como bien suponíamos hoy tendríamos muchos compañeros de viaje y así ha sido. El goteo de gente con la que nos hemos cruzado ha sido constante. De hecho la subida la hemos realizado casi a la par de un numeroso grupo de padres y madres y gran cantidad de valientes, que como los nuestros, no daban tregua.

Tras una nueva valla ya empezamos a tener grandes campas en las laderas muy próximas ya a las  bordas de Zirigarate. El camino sigue subiendo sin ninguna dificultad hasta el collado de Egurral.

Estamos ya muy cerca de la cumbre y ahora si que tenemos que emplearnos a fondo. El camino ya pica con fuerza hacia arriba y la piedra que sobresale en algunos puntos nos hace tener que mirar más donde pisamos. 

Ya en la cima casi tenemos que sacar ticket para hacernos la foto. La verdad es que si bien las vistas eran preciosas hacia cualquier lado, la estancia en la cumbre se ha hecho molesta debido a la gran cantidad de insectos que había en ella.

Finalmente volvemos por el mismo camino y es que nos están esperando muy cerca de las bordas de Zirigarate para comer a la sombra de un par de árboles.

Un refresco en Larraitz pone fin a otro fantástico día de monte. Nos llevamos para casa uno de los clásicos de nuestra geografía.

Fotos aqui

Anillo Verde de Bilbao GR 228

Quedamos a las siete de la mañana en Sarriko. La idea es enlazar con el GR 228 en Lehendakari Aguirre junto al campo de fútbol de Etxezuri. Vamos con dirección a Zorroza para en primer lugar hacer la que a priori es la mayor subida del recorrido. Pensamos que será más cómodo en sentido antihorario.

El día está con un poco de niebla que nos está dejando algunas gotas de agua en esta primera parte del recorrido. Así que con un pequeño paraguas vamos poco a poco a Zorroza. El camino es llano y vamos calentando poco a poco las piernas.

En Zorroza comenzamos a subir hacia el barrio de Zazpi-Landa donde en algún momento las marcas se nos pierden. El reciente curso de Senderos que hemos realizado algunos con la federación vizcaína de montaña, nos da pie a criticar la disposición de algunas de las marcas. 

Seguimos subiendo y cruzamos la carretera de Castresana a la altura de la antigua fábrica de Beyena, hoy en día reducida a escombros, Ahora a través del barrio de Altamira llegaremos a Kobetas donde nos desviaremos para tomar dirección a Arraiz.

En este punto volvemos a criticar el recorrido ya que nos parece más lógico subir por la pista a la cima del monte Arraiz y bajar después al área recreativa que subir hasta ella por carretera. El objetivo de este GR entendemos que sea unir los parques forestales de Bilbao, pero creemos que se debería evitar la carretera lo más posible.

Ahora, tras pasar por Lar Casa Galicia, vamos por pista en dirección a Erreztaleku. Nos tememos que la subida sea por un pendiente sendero que ya hemos realizado en alguna otra ocasión. Así es, llegamos hasta una torreta eléctrica y nos desviamos a la derecha. Y como hoy tenemos el día protestón volvemos a criticar esta subida. Por la pista se podía haber ido hasta la base de Gangoiti y seguir por la derecha a Erreztaleku. Esta crítica viene más bien por comparación con el tramo de Arraiz que por que no nos guste el tramo de subida.

Ya desde Erreztaleku seguimos toda la pista hasta Ganeta y de ahí al collado del Pagasarri, la cima queda para otro día. Ahora toca bajar hacia Buia y buena parte del recorrido ya lo conocemos de alguna subida anterior desde Malmasin. Bajamos hacia La Peña y de ahí saldremos a Bolueta.

Por Txurdinaga y a través de una pequeña carretera con una gran pendiente llegamos a Arbolantxa. Volvemos a coger un tramo de pista y cruzaremos la carretera la seguir sin descanso hasta el monte Avril.

Tres mesas antes de llegar a la trinchera son el mejor sitio para reponer fuerzas. Desde aquí ya será un paseo volver hasta Sarrillo, comentamos. Nada más lejos de la realidad, ya que desde aquí hasta Sarriko será un continuo sube y baja. 

Pasamos junto al área de Vía Vieja de Lezama donde Luis nos cuenta un poco sobre el trazado que él ya ha realizado en bici. La pista es amplia y cuando pensamos que seguiremos a media ladera, llega la subida a Pikotamendi. Desde aquí volvemos a salir a la carretera durante unos cuantos metros. Ahora junto al molino vallado sale el camino que baja hacia Deusto, este lo conozco bien ya que son muchas las veces que de chaval hemos subido hasta Artxanda por él. Bajamos mucho y casi llegamos al barrio de Buenavista, pero otro tramo de pista muy pendiente nos eleva hasta Berriz.

Se está haciendo duro tanto sube y baja, pero más que por el trazado creo que es por que no esperábamos este ultimo tramo con tanto rompepiernas.

Desde Berriz y por el barrio de Arangoiti accedemos a Sarriko para finalizar estos 41 kilómetros y casi 1.700 metros de desnivel. Se ha hecho duro al final pero hemos conseguido nuestro objetivo. Felicidades a todos.

Fotos aquí