Una vez dejado atrás el Puerto de Lizarraga, Urbasa nos daba la bienvenida con un impresionante cielo azul. Iniciamos el recorrido junto al Monasterio de Irantzu, remontando el río a través de su espectacular cañón. Las encinas iban dando paso a los frondosos hayedos. Ganábamos altura poco a poco hasta llegar al collado de Portaundia. Por la pista proveniente de la antigua Venta Zunbeltz, ahora en ruinas, llegamos a la cima del Dulantz de 1239m., punto más alto de la Sierra de Urbasa. Las vistas inmejorables, las Sierras de Urbasa, Andia, Lokiz, Kodes, Toloño, así como Montejurra, Monjardín, Higa de Monreal etc.
Un breve amaiketako y descenso rápido al Monasterio por un precioso bosque. Allí, Javi tenía el fuego en su punto. Las parrilladas de costillitas de cordero, panceta, chorizo y morcillas iban cayendo sin ninguna resistencia. En la hospedería del Monasterio los cafecitos de rigor. Visita al Monasterio y Centro de Interpretación y vuelta a casa.
Desde Bidelagun damos la bienvenida a Eva, Josu, Raul, Casto y como no, a la estrella de la jornada, Bruno.
