Un día excepcional, cielo raso donde las vistas a partir del collado Besaide han sido excepcionales.
Iniciamos el ascenso en el Barrio de Iguria hasta el mencionado collado. Desde allí encaramos el macizo para hacer una primera cumbre en Erdikoatxa de 1.026m. Continuamos muy cerca de la cresta a través de la brecha Uztepe Osta para llegar según dicen a una de las moradas de Mari. Desde allí accedimos a la cima del Udalatx de 1.117m. con su cruz y su mesa de orientación. Merecido amaiketako en la cruz situada en la parte más al este del macizo. Allí encontramos las ruinas de un antiguo santuario de La Asunción donde vivían eremitas. Ya en el año 1570, Esteban de Garabay menciona la basílica que se alzaba en el increíble paraje lejos de todo resto de civilización. Los monjes eremitas vivían de este modo aislados de la vida mundana. También es creencia que en este templo murió San Valero, que fue obispo de Zaragoza. La mitología vasca también sitúa en estos parajes una de las múltiples moradas de Mari.y descenso hacia el barrio de Udala.
Cafecito de rigor y rumbo al Besaide de 564m. Esta loma tiene la particularidad de unir a tres territorios (Bizkaia, Araba y Gipuzkoa). Desde allí regresamos a través del collado de santa Lucia al Barrio de Iguria.
Desde Bidelagun damos la bienvenida a un nuevo debutante, Iñaki, el cual hizo perfectamente las labores de guia autóctono para bajarnos desde el Udalatx a través de un vertiginoso descenso al barrio de Udala y desde allí llevarnos hasta el Besaide.
