Tocaba despedir el año y el día se sumó a la celebración. Con algo de frío, pero con un cielo totalmente despejado nos recibió el día en Bolueta. La verdad es que nos hemos juntado un buen grupo y casi llenamos el microbús.
Partimos hasta la ermita de Arrate en la localidad de Eibar, donde comenzamos a caminar. La pista es ancha y en suave ascenso. Esto hace que podamos ir charlando sin ahogarnos. Hoy es día de compartir momentos con amigas y amigos.
Nos aproximamos a una primera cima y aquí dividimos el grupo. Parte del grupo realizará la ascensión al Kalamua directamente por la pista. Otros decidimos pasar por las tres cimas secundarias que nos encontramos antes de llegar al Kalamua.
El primer grupo llega sin enterarse a la cima, la verdad es que ha resultado un paseo agradable. Una pequeña espera y llega el segundo grupo. Ahora si que podemos hacer la foto de grupo.
Hacemos un ligero picoteo (lo bueno nos espera abajo), comenzamos a bajar. Nuestro objetivo es el barrio de Etxebarria cerca de Markina. Aunque el camino es ancho la pendiente es grande y con la piedra asomando. Esto, unido a la humedad hace que los patinazos sean frecuentes.
Ya en el microbús, nos cambiamos de ropa. Ahora toca ir a comer.
La sidrería Axpe tiene sus puertas abiertas para la celebración del lunch. Josean nos recibe con los brazos y la bodega abiertos. Tras preparar la ensaladas y hacer el fuego para las brasas pasamos a la bodega. En ella Josean nos da una completa explicación de la elaboración de la sidra y del txakoli. Acompañamos las explicaciones con la cata para poder distinguir los diferentes matices de cada caldo.
Para finalizar, café y chupito de patxaran acompañado de buenos cánticos. Por suerte no llovió después del lamentable entonar de los presentes.
En fin, cerramos un bonito año y esperamos que el próximo también lo sea.
URTE BERRI ON DENORI
