El
lunes lo hemos aprovechado para realizar el viaje y una pequeña visita a Pampaneira y a Capileira. Posteriormente nos alojamos en el hotel La
Alfajía de Antonio y cenamos en el bar El Tinao.
Para
nuestro primer día tenemos como objetivo La Acazaba. En el autobús de
Altas Cumbres subimos hasta el Alto del Chorrillo donde la pista deja de
ser transitable a vehículos autorizados. Una pista que aunque
parezca mentira fue la carretera que unía el norte de la provincia con
los pueblos de la Alpujarra. El sol desde primera hora ya nos promete
una jornada calurosa. Nosotros en vez de seguir por la pista, comenzamos
a caminar por el sendero de la derecha, que
en este primer tramo coincide con la subida clásica al Multasen.
Tras una media hora de caminar nos desviamos hacia las Siete Lagunas, donde llegaremos tras atravesar un amplio barranco. Para seguir con la ascensión pasamos de largo la Laguna Hondera y por la Loma Culo Perro accedemos hasta la cima secundaria del Peñón del Globo. La cima nos ofrece estupendas vistas sobre Mulhacen y de la Alcazaba, a la cual llegaremos sin mayor complicación desde este punto.
No hace nada de viento, por lo que la cima de la
Alcazaba es el sitio perfecto para comer y deleitarnos con sus vistas.
La bajada la realizaremos por el Colaero hasta la Laguna Hondera, y a
partir de este punto por el mismo camino de subida.
Tras una media hora de caminar nos desviamos hacia las Siete Lagunas, donde llegaremos tras atravesar un amplio barranco. Para seguir con la ascensión pasamos de largo la Laguna Hondera y por la Loma Culo Perro accedemos hasta la cima secundaria del Peñón del Globo. La cima nos ofrece estupendas vistas sobre Mulhacen y de la Alcazaba, a la cual llegaremos sin mayor complicación desde este punto.
El
segundo día nos toca el techo de la península. Desde el mismo punto del
día anterior partimos en lo que será una corta ascensión pero sin
prácticamente descanso. Hoy no tomaremos ningún desvío y seguiremos
de frente hasta la cima del Mulhacen Sur.
En este punto hacemos una
pequeña parada para realizar unas cuantas fotos de toda la sierra. A lo
lejos ya vemos nuestra cima principal, la cual no supone mayor esfuerzo
que el que pueda provocar la altitud, aunque
parece que no está afectando al grupo.
Llegamos a la cima del Mulhacen,
el techo de la península. Aquí se nos va de las manos el asunto de las
fotos. Todos queremos la nuestra de recuerdo, además de la del grupo.
Nos pasamos un buen rato en la cima disfrutando
del momento. De todas formas el día vuelve a ser perfecto, estos dos
días hemos estado en manga corta durante toda la jornada.
Para bajar optamos por la fuerte pendiente que nos lleva hasta el refugio y la laguna de La Caldera. El refugio está muy limpio, lo cual es de agradecer sobre todos por quienes optan por pernoctar en él. Tras comer en el refugio cogemos la pista que nos llevará hasta el Alto del Chorrillo. Quién diría que no hace tantos años por aquí circulaban vehículos.
Para bajar optamos por la fuerte pendiente que nos lleva hasta el refugio y la laguna de La Caldera. El refugio está muy limpio, lo cual es de agradecer sobre todos por quienes optan por pernoctar en él. Tras comer en el refugio cogemos la pista que nos llevará hasta el Alto del Chorrillo. Quién diría que no hace tantos años por aquí circulaban vehículos.
Ya en Capileira toca trasladarnos a Granada donde nos alojaremos las tres próximas noches.
Tercer
día y cambiamos a la vertiente norte de la sierra. Desde la Hoya de la
Mora comenzamos a subir siendo nuestro primer punto de parada la Virgen
de las Nieves.
Seguiremos subiendo hasta las posiciones del Veleta donde tenemos los restos de unos puestos de vigilancia de la guerra civil. Con otro pequeño arreón llegamos a la cima. A pesar de remontes y pistas la ascensión ha resultado gratificante.
Se nota que estamos en la cara norte, ya que hoy el viento sí que ha hecho que en algunos momentos hayamos tenido que ponernos el cortavientos. Bajamos hasta el refugio-vivac de la Carihuela. Tras comer un poco en este punto, el grupo se divide en dos.
Unos para volver prácticamente por el mismo camino, la otra parte del grupo continuará con el objetivo del Cerro de los Machos. Llegados al paso de los guías el cual está equipado con una cadena, se toma la decisión de volver a la pista para salvar este paso.
Un poco más de vuelta, pero también más tranquilidad. Una corta pero dura subida deja al grupo en el vértice del cerro de los Machos. La bajada se realiza por el Corral del Veleta que tiene una gran pendiente, complicada por las piedras sueltas. Pasando bajo los tajos del Veleta se ve lo que quiso ser el túnel de la línea ferroviaria que uniría Granada y Almería. Ahora por el Veredón Superior y salvando un fuerte desnivel en pocos metros se llega a las Posiciones del Veleta. Desde este punto el resto del descenso se realiza por el camino de subida.
Seguiremos subiendo hasta las posiciones del Veleta donde tenemos los restos de unos puestos de vigilancia de la guerra civil. Con otro pequeño arreón llegamos a la cima. A pesar de remontes y pistas la ascensión ha resultado gratificante.
Se nota que estamos en la cara norte, ya que hoy el viento sí que ha hecho que en algunos momentos hayamos tenido que ponernos el cortavientos. Bajamos hasta el refugio-vivac de la Carihuela. Tras comer un poco en este punto, el grupo se divide en dos.
Unos para volver prácticamente por el mismo camino, la otra parte del grupo continuará con el objetivo del Cerro de los Machos. Llegados al paso de los guías el cual está equipado con una cadena, se toma la decisión de volver a la pista para salvar este paso.
Un poco más de vuelta, pero también más tranquilidad. Una corta pero dura subida deja al grupo en el vértice del cerro de los Machos. La bajada se realiza por el Corral del Veleta que tiene una gran pendiente, complicada por las piedras sueltas. Pasando bajo los tajos del Veleta se ve lo que quiso ser el túnel de la línea ferroviaria que uniría Granada y Almería. Ahora por el Veredón Superior y salvando un fuerte desnivel en pocos metros se llega a las Posiciones del Veleta. Desde este punto el resto del descenso se realiza por el camino de subida.
Para
acabar la jornada nos enfundamos nuestras camisetas del Athletic y nos
vamos de tapeo con el objetivo de ver el partido de Europa Leage. Por el
camino nos cruzamos con Francisco, un chaval de Ubeda y
gran seguidor del Athletic. Emociona oírle hablar de su Athletic, esta
gente tiene verdadero mérito.
El
cuarto día no tocamos Sierra Nervada, nos quedaremos en la Sierra de
Hijar. Esta sierra antecede a la de Sierra Nevada desde Granada. Desde
La Zubia, en el parking del mirador de la Esparterana dejamos
el coche.
Nosotros cogeremos el sendero balizado como PR-A21 y por él
accedemos a la cuerda del Trevenque. Desde aquí y viéndolo siempre
frente a nosotros nos vamos aproximando a nuestro objetivo. Lo que más nos
llama la atención es el cambio de paisaje con respecto
a Sierra Nevada. Esta es una zona donde dominan las rocas
calizo-dolomíticas que son muy fácilmente erosionables, de ahí las
agujas de piedra y las zonas de arenales que encontramos en nuestro
camino. El sendero es precioso pero de exigente subida.
Tras un giro a la izquierda entre un bloque de piedras, llegamos a un collado desde el cual atacaremos la cima. Las vistas desde aquí son espectaculares del Cerro del Caballo, Veleta, etc. Tras realizar algún pequeño apoyo llegamos a la cima de Trevenque, el rey de la media montaña granadina.
Tras un giro a la izquierda entre un bloque de piedras, llegamos a un collado desde el cual atacaremos la cima. Las vistas desde aquí son espectaculares del Cerro del Caballo, Veleta, etc. Tras realizar algún pequeño apoyo llegamos a la cima de Trevenque, el rey de la media montaña granadina.
De
vuelta al collado bajamos por un empinado sendero junto a unas
torrenteras. Hay que prestar atención ya que la arena y grava pueden
hacernos resbalar en algún momento. Posteriormente enlazaremos con una
pista entre pinos, que en un primer momento nos dejará en la casa
forestal de La Cortijuela.
En ella hay unas mesas donde pararemos a comer un poco. Posteriormente seguiremos la pista que tras pasar por el puente de los siete ojos nos llevara hasta el parking donde dejamos el coche.
En ella hay unas mesas donde pararemos a comer un poco. Posteriormente seguiremos la pista que tras pasar por el puente de los siete ojos nos llevara hasta el parking donde dejamos el coche.
La
ruta de hoy nos permite finalizar a buena hora y aprovechar la tarde
noche para visitar el Albaicín y contemplar La Alhambra al atardecer.
La
mañana del sábado la dedicamos a visitar La Alhambra. Un paseo por los
jardines, la Alcazaba y el Generalife ponen punto y final a nuestro
viaje. A mediodía comenzamos el viaje de vuelta.
La
salida ha resultado espectacular, el ambiente como suele ocurrir siempre
ha sido fabuloso y además tanto el tiempo como las rutas han cubierto
las expectativas.